Dante Pinal.–
Tal y como estaba previsto, el morenista Félix Salgado Macedonio, amagó que no habrá elecciones en Guerrero si el “neoliberal” Instituto Nacional Electoral, se atreve a “no devolverle la candidatura al gobierno de Guerrero”.
Amenaza directamente a los consejeros del INE, incluso hasta en sus casas, para exhibirlos públicamente su nivel de vida, “no le rasguen los huevos al toro”. Vaya forma de hacer política del morenista Macedonio. Su intención real violentar la ley, incitando a la violencia.
Asegura que esta conformando un ejército democrático que “lucha por la cuarta transformación (sic). La soberanía radica en el pueblo, no hay poder que este por encima del pueblo”.
Son palabras frecuentes que utilizan los políticos morenistas: “el pueblo me apoya, el pueblo no lo va a permitir”, para escudarse, amenazar y avisar al resto de la sociedad, que toda acción que realicen, así sean vandálicas será y es en defensa de la democracia.
Pero ¿en verdad representan a toda una población? ¿todo el pueblo de Guerrero está a favor de las movilizaciones que esta ejecutando Salgado Macedonio? ¿no existe la oposición política en el Estado?
Si fuera realidad, no solo tendríamos en la Ciudad de México, a un grupo de seguidores de Félix Salgado, se apersonarían miles y miles de guerrerenses protestando por su líder, su candidato.

En Guerrero, ya habría movilizaciones de protesta, las carreteras estarían cerradas. Habría manifestaciones de apoyo en todas las pueblos de la entidad sureña. Afortunadamente y por el bien de la democracia no ha sido así.
Cual si fuera a convertirse en un mártir de la democracia, merecimiento que afortunadamente nunca llegará, el candidato morenista regresó a la Ciudad de México, a realizar sus plantones afuera de las instalaciones del INE.
Bien dice su consejero presidente, Lorenzo Córdova, sobre las próximas elecciones: “la creciente polarización y desinformación ponen en riesgo a la democracia”.
La polarización y la intolerancia a las que se refiere el presidente del INE, son conceptos que bien le quedan a personajes como Félix Salgado Macedonio, que, como a otros políticos que se dicen defensores de la izquierda en México, comúnmente son intolerantes y les gusta violentar las leyes, sin importar los resultados subsecuentes.
Esperemos que exista un poco de coherencia del actual gobierno, del cual dudamos y ponga un hasta aquí, a los candidatos rijosos que solo ponen en peligro a la democracia con sus actos de barbarie política.
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