Rodolfo Higareda.-
En todas las mesas de discusión política se percibe un sentimiento de derrota inevitable para el 2024 por parte de la oposición. Los más optimistas dicen que solamente si Marcelo Ebrard rompe con López Obrador y se pasa a Movimiento Ciudadano, podría haber una posibilidad de triunfo contra el castrocahavismo gobernante.
Y las conversaciones se ponen aún más trágicas, cuando después de sesudas elucubraciones salen con que al final el canciller es la opción menos peor. Debo confesar que en estas mesas de las que les hablo hay de todo: Desde políticos brillantes y de larga experiencia, hasta analistas estupendos y bien forjados; quienes intercambian opiniones con personas comunes, digamos empresarios grandes y medianos, así como gente de clase media exitosa y preparada (“aspiracionistas” diría el inquilino del palacio). En resumen, son convites que amalgaman a los votantes que le dieron el triunfo a López en el 2018.

Son esos mismos, no otros, esos que fueron a la urna y se dijeron a sí mismos: “Pues ya votamos PRI, ya votamos PAN, vamos pues a darle un chance a este”. Y así sin más, con la frialdad de un suicida, nos arrojaron sin memoria ni reflexión alguna al infierno socialista/populista que hoy manda en América Latina. Ni siquiera fueron para recordar al terrible gobierno que hizo ese tabasqueño en una ciudad que no era la suya, a la que desprecia y no conoce. No fueron capaces de meditar al menos sobre el enorme daño que López le venía haciendo a nuestra joven democracia… con sus absurdos reclamos de fraude electoral.
Y bueno, ahí están de regreso porque son los mismos y no se fueron, esos electores mexicanos tan sagaces, ahora prestos para darle su voto a Ebrard. Y es que con total desparpajo le dicen a uno que ese defensor de las dictaduras más salvajes de nuestro continente (ni se enteran) “no sería tan malo”. Bueno, de alguna suerte los comprendo cuando se trata de comparar a este gallo con Claudita o con El Abuelo de los Monsters reencarnado en secretario de gobernación.
Y es que nuestros votantes, bien educados y alimentados, son incorregibles. No les pasa por la mente el News Divine (ni saben de lo que hablo, aunque lo lean dos veces) ¿La tragedia de los policías federales quemados vivos en Tláhuac? Ni idea. Bueno, ni de sopesar la caída de la Línea 12 son capaces. ¿Será porque nunca se suben al Metro? Yo los escucho casi en silencio… y es que ahora con la vejez (sí, después de los 50 ya estamos viejos) me da por escuchar mucho y cerrar el hocico. Pero luego vuelvo a casa, rememoro sus argumentos, y me dan unas ganas irresistibles de meterme una botella de whiskey y quedarme dormido.

Ante la ausencia absoluta de un líder opositor, inteligente y disruptivo, uno que polarice pero que ofrezca alternativas que realmente nos saquen del pozo en el que estamos, parece que el francesito les quedará como la opción más viable. Únicamente Gabriel Quadri tiene esas características que señalo, pero veo muy difícil que logre el consenso necesario entre los partidos de la alianza opositora. De La Madrid es inteligente y atractivo, pero no genera pasión alguna (espero que en casa sí lo logre). Hay quienes dicen que les gusta Lily Téllez (es lista y polarizante también). Pero en resumen, vivimos una tragedia por dónde se le vea. El tiro parece ser que será entre ellos, los de MORENA; como cuando vivíamos bajo el régimen de ese PRI avasallante. Así las cosas, al final a ver si no termino lanzándome yo, aunque sea en un paracaídas.
@RudyCoen
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